El mantenimiento de un descalcificador es importante para garantizar su buen funcionamiento y que cumpla con su propósito. En otras palabras, para que pueda seguir eliminando el calcio y sales de magnesio que están presentes en el agua.
A continuación, explicaremos cómo realizamos el servicio de mantenimiento de un descalcificador y por qué debe hacerse.
¿Por qué realizar el mantenimiento de un descalcificador?
El descalcificador elimina las sales del agua o la cal a través de su sistema de intercambio de iones.
Esto evita que la cal se acumule en las tuberías, aumentando la vida útil de estas y también de los electrodomésticos. Al igual que el rendimiento y reducción del consumo energético.
No obstante, como cualquier otro equipo, es necesario hacer un mantenimiento al descalcificador de manera constante.
Porque esto ayudará a que el equipo funcione de forma correcta, tenga más durabilidad y se mantenga en las mejores condiciones.
¿Cómo hacemos el mantenimiento?
Para el correcto mantenimiento, se deben hacer una serie de pasos. Estos son:
Comprobación del nivel de la sal
El descalcificador usa sal para eliminar la cal del agua, es por eso, que cada cierto tiempo se debe comprobar que el depósito tenga sal. Por lo general, un descalcificador estándar consume 12 sacos al año de sal, pero los de bajo consumo suelen gastar solo 4 al año.
Sanitización
Es importante hacer una desinfección del equipo, como mínimo una vez al año para garantizar la salubridad del agua. Para realizar la higienización del equipo, se introduce en el sistema una sustancia que sirve como bactericida y se encarga de limpiar la resina del equipo.
Luego, se hace una regeneración del descalcificador que dura 2 horas como máximo. Es importante que este proceso se lleve a cabo cada año para evitar que la carga de materia orgánica se acumule en la resina y retenga todo el cloro del agua de la red.
Cambiar el filtro de sedimentos
El filtro de sedimentos se encuentra situado en la tubería de entrada del descalcificador, reteniendo los sedimentos y partículas que impiden que pasen al equipo.
Esto es significativo, porque hay partes del descalcificador que son muy sensibles a la presencia de las partículas. Este es el caso de ventouri, es una pieza que realiza la succión de la salmuera por medio de un pequeño orificio.
Si esta pieza se obstruye el descalcificador deja de funcionar. Al igual que la sanitización, cambiar el filtro de sedimentos se debe hacer cada año.
Analizar la dureza del agua
Para finalizar, se analiza la dureza del agua para verificar que todo funciona de forma correcta en el descalcificador. Una dureza superior a 10°F indica que el descalcificador se encuentra averiado.
¿Qué hacer si el descalcificador no funciona?
Para comprobar que el descalcificador funciona, hay que verificar una serie de indicadores:
- Comprobar el consumo de la sal: Si el descalcificador consume menos sal o no consume, lo más probable es que esté averiado.
- Verificar la espuma que se produce con el jabón: Al producir menos espuma con la misma cantidad de jabón es factible que haya cal en el agua.
- Medir la dureza del agua: Se mide con un reactivo con solución A y B.
Busca ayuda para un buen mantenimiento del descalcificador
Ya conoces la importancia de realizar el mantenimiento a un descalcificador, y desde Aqualife Andalucía te invitamos a informarte en nuestra para estas revisiones periódicas.
Si tienes un descalcificador de agua y necesitas que un experto lo revise, no dudes en contactar con nosotros.